2 Reyes 18 - Nueva Biblia de los Hispanos

Libro de 2 Reyes
Capitulos:

12345678910111213141516171819202122232425

1 - En el año tercero de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías, hijo de Acaz, rey de Judá.

2 - Tenía veinticinco años cuando comenzó a reinar, y reinó veintinueve años en Jerusalén. El nombre de su madre {cf15i era} Abi, hija de Zacarías.

3 - Hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR, conforme a todo lo que su padre David había hecho.

4 - Quitó los lugares altos, derribó los pilares {cf15i sagrados} y cortó la Asera (deidad femenina). También hizo pedazos la serpiente de bronce que Moisés había hecho, porque hasta aquellos días los Israelitas le quemaban incienso; y la llamaban Nehustán.

5 - Ezequías confió en el SEÑOR, Dios de Israel. Después de él, no hubo ninguno como él entre todos los reyes de Judá, ni {cf15i entre los} que fueron antes de él,

6 - porque se apegó al SEÑOR; no se apartó de El, sino que guardó los mandamientos que el SEÑOR había ordenado a Moisés.

7 - El SEÑOR estaba con él; adondequiera que iba prosperaba. Se rebeló contra el rey de Asiria y no le sirvió.

8 - Derrotó a los Filisteos hasta Gaza y su territorio, desde las torres de atalaya hasta las ciudades fortificadas.

9 - En el año cuarto del rey Ezequías, que era el año séptimo de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, Salmanasar, rey de Asiria, subió contra Samaria y la sitió,

10 - y después de tres años la tomaron. En el año sexto de Ezequías, que era el año noveno de Oseas, rey de Israel, Samaria fue tomada.

11 - Y el rey de Asiria llevó a Israel al destierro en Asiria, y los puso en Halah y en el Habor, río de Gozán, y en las ciudades de los Medos,

12 - porque no obedecieron la voz del SEÑOR su Dios, sino que quebrantaron Su pacto, {cf15i es decir,} todo lo que Moisés, siervo del SEÑOR, había ordenado; no escucharon, ni {cf15i lo} cumplieron.

13 - En el año catorce del rey Ezequías, subió Senaquerib, rey de Asiria, contra todas las ciudades fortificadas de Judá, y las tomó.

14 - Entonces Ezequías, rey de Judá, envió a decir al rey de Asiria en Laquis: "He hecho lo malo. Retírate de mí; lo que me impongas, aceptaré." Y el rey de Asiria impuso a Ezequías, rey de Judá, 10.2 toneladas de plata y una tonelada de oro.

15 - Y Ezequías {cf15i le} dio toda la plata que se hallaba en la casa del SEÑOR y en los tesoros de la casa del rey.

16 - En aquel tiempo Ezequías quitó {cf15i el oro de} las puertas del templo del SEÑOR, y {cf15i de} los postes {cf15i de las puertas} que {cf15i el mismo} Ezequías, rey de Judá, había revestido {cf15i de oro,} y lo entregó al rey de Asiria.

17 - Desde Laquis el rey de Asiria envió a Jerusalén, al Tartán, al Rabsaris y al Rabsaces (oficiales de alto rango) con un gran ejército contra el rey Ezequías. Y subieron y llegaron a Jerusalén. Y cuando subieron, llegaron y se colocaron junto al acueducto del estanque superior que está en la calzada del campo del Batanero.

18 - Llamaron al rey, y salió a ellos Eliaquim, hijo de Hilcías, que era mayordomo, con el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf.

19 - Entonces el Rabsaces les dijo: "Digan ahora a Ezequías: 'Así dice el gran rey, el rey de Asiria: "¿Qué confianza es ésta que tú tienes?

20 - "Tú dices (pero sólo {cf15i son} palabras vanas): '{cf15i Tengo} consejo y poder para la guerra.' {cf15i Pero} ahora, ¿en quién confías que te has rebelado contra mí?

21 - "Yo sé que tú confías en el báculo de esta caña quebrada, {cf15i es decir,} en Egipto, en el cual, si un hombre se apoya, penetrará en su mano y la traspasará. Así es Faraón, rey de Egipto, para todos los que confían en él.

22 - "Pero si ustedes me dicen: 'Nosotros confiamos en el SEÑOR nuestro Dios,' ¿no es El aquel cuyos lugares altos y cuyos altares Ezequías ha quitado y ha dicho a Judá y a Jerusalén: 'Adorarán delante de este altar en Jerusalén'?

23 - "Ahora pues, te ruego que llegues a un acuerdo con mi señor el rey de Asiria, y yo te daré 2,000 caballos, si por tu parte puedes poner jinetes sobre ellos.

24 - "¿Cómo, pues, puedes rechazar a un oficial de los menores de los siervos de mi señor, y confiar en Egipto para {cf15i tener} carros y hombres de a caballo?

25 - "¿He subido ahora sin el {cf15i consentimiento del} SEÑOR contra este lugar para destruirlo? El SEÑOR me dijo: 'Sube contra esta tierra y destrúyela.'"'"

26 - Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, Sebna y Joa dijeron al Rabsaces: "Le rogamos que hable a sus siervos en Arameo, porque nosotros {cf15i lo} entendemos, y no nos hable en la lengua de Judá a oídos del pueblo que está sobre la muralla."

27 - Pero el Rabsaces les dijo: "¿Acaso me ha enviado mi señor para hablar estas palabras {cf15i sólo} a tu señor y a ti, y no a los hombres que están sentados en la muralla, {cf15i condenados} a comer sus propios excrementos y beber su propia orina con ustedes?"

28 - El Rabsaces se puso en pie, gritó a gran voz en la lengua de Judá, y dijo: "Escuchen la palabra del gran rey, el rey de Asiria.

29 - "Así dice el rey: 'Que no los engañe Ezequías, porque él no los podrá librar de mi mano;

30 - ni que Ezequías les haga confiar en el SEÑOR, diciendo: "Ciertamente el SEÑOR nos librará, y esta ciudad no será entregada en manos del rey de Asiria.'"

31 - 'No escuchen a Ezequías, porque así dice el rey de Asiria: "Hagan la paz conmigo y salgan a mí, y coma cada uno de su vid y cada uno de su higuera, y beba cada cual de las aguas de su cisterna,

32 - hasta que yo venga y los lleve a una tierra como la tierra de ustedes, tierra de grano y de vino nuevo, tierra de pan y de viñas, tierra de olivos y de miel, para que vivan y no mueran." Pero no escuchen a Ezequías porque los engaña, diciendo: "El SEÑOR nos librará."

33 - '¿Acaso alguno de los dioses de las naciones ha librado su tierra de la mano del rey de Asiria?

34 - '¿Dónde están los dioses de Hamat y de Arfad? ¿Dónde están los dioses de Sefarvaim, de Hena y de Iva? ¿Cuándo han librado ellos a Samaria de mi mano?

35 - '¿Quiénes de entre todos los dioses de estas tierras han librado su tierra de mi mano, para que el SEÑOR libre a Jerusalén de mi mano?'"

36 - Pero el pueblo se quedó callado y no le respondió palabra alguna, porque la orden del rey era: "No le respondan."

37 - Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, mayordomo de la casa {cf15i real,} el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf, fueron a Ezequías con sus vestidos rasgados, y le relataron las palabras del Rabsaces.